Una lactancia de éxito, garantía de salud

Paloma de MiguelIBCLC certificada en lactancia de la Unidad de Pediatría del Hospital Quirónsalud Valencia

La naturaleza es sabia, y por mucho que el ser humano haya evolucionado con respecto al resto de mamíferos, no debemos olvidar que nosotros también lo somos y por tanto, las hembras de cada especie producen la leche adaptada para el óptimo desarrollo de sus hijos. Como bien defiende la Organización Mundial de la Salud (OMS), la leche materna no sólo es importante a nivel nutricional si no que, es fundamental como protección inmunológica, para el desarrollo neurológico y vinculación con la madre. Tanto es así que esta semana se celebra la Semana Mundial de la Lactancia Materna, con el objetivo de proteger, promover y respaldar esta forma de alimentación para los bebés de todo el mundo.

La evidencia científica ha asociado la lactancia a una menor incidencia de enfermedades respiratorias, otitis, gastroenteritis, diarrea, infecciones de orina, meningitis o síndrome de muerte súbita en niños, obesidad, etc., También es importante a nivel de salud para la madre ya que disminuye el riesgo de depresión postparto, anemia, diabetes, osteoporosis, cáncer de útero, pecho y ovario, etc,.

Y en otros casos los beneficios son compartidos, como en el caso del sueño, tan importantes para madre e hijos. El bebé alimentado con lactancia materna duerme más y mejor (ya que la leche es más rica en melatonina y esta hormona favorece el sueño), al tiempo que reduce la probabilidad de cólicos. Y se ha demostrado que las madres que dan el pecho a sus hijos duermen, de media, 30 minutos más cada noche además de presentar más periodos de sueño profundo y éstos, ser más largos.

Lo ideal, según la OMS, es que sea el único ingrediente del menú infantil durante los seis primeros meses de vida para, a partir de ahí, prolongarla como mínimo hasta los 2 años complementándola con otros alimentos. Pero para que esa teoría se traduzca a la práctica, el camino no es fácil y requiere un apoyo profesional constante de la madre que debe empezar en el momento del embarazo.

Humanización asistencial y trabajo en equipo

En ese sentido, el trabajo multidisciplinar de los servicios de Ginecología y Obstetricia y Pediatría es un elemento fundamental para garantizar la calidad y humanización asistencial en durante todo el proceso. Algo por lo que apostamos en nuestro hospital y que, en este caso, nos ha servido para convertirnos en el único centro español con el galardón IBCLC Care Aware, distinguido por la prestigiosa Asociación Internacional de Consultores de Lactancia e IBCLC. Esta acreditación se otorga a hospitales que cuentan con una Consultora Internacional en Lactancia Materna y un programa específico de lactancia así como por la divulgación de esta práctica y la excelencia en el cuidado. La que, por supuesto, merecen cualquier madre e hijo.

Durante la gestación las charlas específicas y actualizadas que ofrecemos sobre Lactancia Materna, son claves para informar a las familias sobre las recomendaciones y el manejo para ayudar al establecimiento del amamantamiento de forma adecuada. La atención en planta por parte de nuestra Consultora de Lactancia ayuda con la técnica y la constancia que son determinantes para no desistir tras unos primeros intentos que no siempre son como uno espera. El dolor en el pecho y la dificultad por conseguir una postura adecuada influyen en el bienestar de la madre y condiciona la producción de leche y la extracción por parte del bebé.

La consulta externa de lactancia una vez en casa, nos da la seguridad de contar con un profesional de referencia que nos dará seguridad y nos ayudará a pasar por las diferentes etapas (vuelta al trabajo, alimentación complementaria, destete, etc.,) y soluciona cualquier dificultad que pueda darse. A esta consulta también acuden mujeres que dan a luz en otros hospitales con problemáticas diversas.

De hecho, hay estudios que indican que aproximadamente el 80 por ciento de las mujeres embarazadas desean amamantar a sus bebés pero solo el 65 por ciento lo hace cuando sale del hospital. Para evitar o minimizar ese decalaje, el seguimiento que puede aportar el Servicio de Pediatría es igualmente relevante, ya que las causas principales de ese fracaso son precisamente la falta de apoyo e información en esos primeros momentos. El objetivo debe ser conseguir que las tomas sean completamente efectivas, indoloras y placenteras, y que en ese momento tan íntimo entre madre e hijo prime la paz. Para que, parafraseando a Humphrey Bogart en Casablanca, la lactancia materna se convierta en el inicio de una buena, en este caso, maternidad.