Los titanes petroleros de Rusia y Arabia Saudí afrontan una larga guerra de precios. Es una batalla que pondrá a prueba sus nervios, ¿quién parpadeará antes? Los precios mundiales del petróleo cayeron un tercio después de que Riad descontara el precio de su crudo y dijera que aumentaría la producción. Los dos principales exportadores petroleros mundiales tienen fondos de reserva de unos 500.000 millones de dólares para resistir el impacto económico y hacen ruidos alcistas sobre su resistencia mientras se cuadran. Moscú asegura que podría soportar precios de 25-30 dólares por barril durante 6-10 años. Riad puede permitirse un crudo a 30 dólares, pero tendría que vender más para suavizar el impacto en sus ingresos, según fuentes consultadas por Reuters, informan Davide Barbuscia y Darya Korsunskaya. Sin embargo, una guerra de desgaste sería perjudicial y obligaría a ambos países a hacer ajustes difíciles en sus economías cuanto más se alargue. "Como con cualquier guerra, esto se reduce a cuánto dolor puede absorber cada parte", dijo Hasnain Malik, de Tellimer.

En Arabia Saudí, el príncipe heredero Mohammed bin Salman dio luz verde para que el reino –el principal exportador mundial de petróleo– bombee a voluntad después de que Rusia rechazase una propuesta de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) de recortes más profundos para hacer frente al brote de coronavirus, dijeron dos fuentes.

El problema para Riad es que los bajos precios sostenidos limitarán probablemente el gasto del Gobierno en proyectos que son parte del impulso del príncipe heredero para diversificar la economía. Monica Malik, economista jefe del Banco Comercial de Abu Dabi, dijo que, con los precios del petróleo cerca de los 30 dólares, Arabia Saudita registraría un déficit de dos dígitos como porcentaje del PIB este año.

Bajo la presidencia de Vladimir Putin, Rusia ha acumulado reservas de 570.000 millones de dólares. Según los analistas, Rusia está mucho mejor posicionada para resistir un impacto económico que en 2014, cuando Occidente le impuso sanciones por la anexión de la región ucraniana de Crimea, o en 2008, cuando fue golpeada por la crisis financiera mundial.

"Muchas personas nos criticaron, dijeron que es como un cofre del tesoro, que el Ministerio de Finanzas está sentado en oro", dijo el ministro de Finanzas, Anton Siluanov, la semana pasada sobre las reservas. "Pero ahora la situación podría cambiar y financiaremos todos los gastos que hemos emprendido y que estamos obligados a hacer con este cofre del tesoro", declaró. Aún así, el rublo cayó a su nivel más débil desde inicios de 2016 en el mercado interbancario. Chris Weafer, director de la consultora Macro-Advisory, dijo que todavía es posible que Moscú pueda decidir volver a cooperar con la OPEP en el otoño boreal si los precios siguen siendo muy bajos. "Putin será reacio a agotar las reservas financieras demasiado para financiar un déficit en expansión", agregó.

TURQUÍA, LA UE Y EL PACTO MIGRATORIO

Turquía y la Unión Europea revisarán la aplicación del acuerdo que firmaron en 2016 para impedir la entrada de migrantes a territorio comunitario. Es la conclusión de la reunión que el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, mantuvo este lunes con el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, después de anunciar el 29 de febrero que abría las fronteras. En la reunión también abordaron el conflicto en Siria, y Michel aseguró que la UE apoya "toda solución política para dar más estabilidad". EFE

EL HEREDERO SAUDÍ NEUTRALIZA A RIVALES

El príncipe heredero saudí, Mohammad bin Salman, neutralizó a sus principales rivales en la sucesión del trono, en una operación en la que fueron detenidos varios príncipes que podrían hacerle sombra en un futuro próximo. Bin Salman está preparando una sucesión rápida de su padre, el rey Salman, que a los 84 años sufre demencia senil. Hace una semana que una larga lista de príncipes, incluyendo a su tío y su primo, se encuentran confinados en distintas villas de Riad, informa Eugenio García Gascón. EQ

BIDEN Y SANDERS: LA CARRERA DEMÓCRATA

Después del supermartes, ya sólo quedan las candidaturas de Joe Biden y Bernie Sanders en la carrera para elegir al aspirante demócrata a la presidencia de los Estados Unidos. Las primarias se convierten así en un referéndum entre el continuismo del primero y el giro a la izquierda del segundo, informa Manuel Ruiz Rico. Los próximos cónclaves demócratas, como el de esta semana en Michigan, serán decisivos para sus aspiraciones a liderar la candidatura presidencial del Partido Demócrata. EQ