Los hosteleros, agradecidos con las empresas que se han volcado con ellos durante la pandemia

Tres profesionales de la hostelería de diferentes lugares de España describen cómo han afrontado la crisis de la Covid-19 y el papel fundamental que ha supuesto para ellos el apoyo desinteresado de compañías como Mahou San Miguel, que nunca han dejado de estar a su lado en los momentos más difíciles.

Mahou San Miguel siempre ha estado al lado de los hosteleros y en estos tiempos difíciles de Covid-19 no ha dejado de hacerlo, poniendo en marcha ayudas reales para los establecimientos que les permitieran mitigar los efectos de la pandemia en sus negocios. La cervecera va a destinar a lo largo de este año 2021 más de 180 millones de euros para impulsar a la Hostelería, continuando así la senda marcada en 2020, cuando renunció conscientemente a su beneficio para contribuir a la reactivación de este sector clave para la economía nacional.

La compañía ha puesto en marcha un nuevo Plan de Apoyo que plantea ayudas financieras personalizadas, el acondicionamiento de terrazas e iniciativas que promueven la digitalización y sostenibilidad de los establecimientos, y seguirá, además, centrándose en escuchar a cada hostelero para desarrollar soluciones personalizadas a medida, como lleva haciendo desde el inicio de la pandemia.

Estas ayudas se han comunicado en el marco de la nueva campaña de la cervecera Somos Familia, en la que sus cuatro marcas icónicas -Mahou, San Miguel, Alhambra y Solán de Cabras- vuelven a unirse para apoyar a la Hostelería y rendirle su particular homenaje.

Porque en Mahou San Miguel están "orgullosos de ganar menos para ayudar más, como destacaba Peio Arbeloa, director general de la Unidad de Negocio España de la cervecera, y el sector hostelero no merece menos.

Los hosteleros, por su parte, agradecen el apoyo y el esfuerzo de una compañía que vive por y para sus clientes.

Iago (A Coruña): "Mahou San Miguel apareció de la nada con todo el apoyo posible"

Es el caso de Iago Cagiao, que regenta el establecimiento El Rincón del Alba, en A Coruña. Iago confiesa que la pandemia surgió cuando estaban "en el mejor momento del negocio", que se tornó "en miedo por saber qué pasaría con nuestros clientes cuando volviésemos a abrir, ya que no nos imaginábamos que iba a ser tan duro y largo". El Rincón del Alba cerró sus puertas en febrero de 2020 y pudo reabrir pasados unos meses, adaptándose a los aforos y fomentando "el tema del delivery y el take away, una vía de negocio que hasta ese momento no habíamos puesto en marcha”.

Iago agradece a sus clientes el cariño durante todos esos meses de incertidumbre, y especialmente a Mahou San Miguel, que nunca dejó de estar ahí: "Hay tres pilares fundamentales que nos han ayudado: la clientela, porque el apoyo de la gente ha sido increíble; los caseros, que se portaron fenomenal con el tema de los cierres; y por supuesto Mahou San Miguel, que apareció de la nada con todo el apoyo posible y siempre apostó por este local desde el primer momento. Hay un cariño enorme hacia la compañía, que ha estado al pie del cañón con nosotros y salió a nuestro rescate en plena pandemia sin nosotros pedir ni esperar nada".

Mahou San Miguel puso todo su empeño en ayudar: "Nos repusieron cerveza y agua y nos vino fenomenal para poder abrir. Nos ayudaron a hacer frente a algunos gastos derivados del local, nos apoyaron también con asesoramiento legal durante la pandemia, con la entrega periódica de kits con gel hidroalcohólico para el local… Estamos muy contentos, nos está yendo muy bien y vamos a salir de ésta. Esperamos que la situación se normalice cuánto antes y podamos volver a operar sin limitaciones", concluye.

Jorge (Barcelona): "Nos ayudaron con el cerramiento de la terraza"

Otro buen ejemplo de ayuda por parte de la cervecera al sector hostelero lo protagoniza Jorge Gerpe Feliu, del local barcelonés 5 Hermanos. Jorge afirma que lo más duro fue tener que cerrar el negocio y estar tres meses en casa sin poder trabajar. Después poco a poco fueron remontando fundamentalmente con su apuesta por el reparto de comida a domicilio.

"Fue muy fuerte. En un principio era un cierre de quince días, pero cuando ves que pasa un mes y dos, te preocupas bastante, sobre todo por mis trabajadores. Somos una empresa familiar pequeña, formada por cuatro hermanos y un sobrino, pero tenemos cinco trabajadores más", confiesa Jorge, que tampoco pensó nunca en el cierre fuera definitivo a pesar de que todo se ponía en contra.

Jorge cree que "de todo se aprende" y va mucho más lejos: "De la pandemia hemos aprendido que es mucho más importante la vida que el negocio y que hay que seguir poniendo ganas e ilusión y priorizar las cosas y vivir. Por eso hemos decidido dejar de servir cenas y centrarnos en el desayuno, el almuerzo y la comida".

Para reabrir 5 Hermanos adaptaron la terraza, la cerraron con una carpa y pusieron estufas, y de cara al verano, una nueva adaptación, pero se muestra igualmente agradecido a todos los que confiaron en solventar los problemas: "Nuestros proveedores aceptaron que suspendiéramos pagos y afrontáramos la deuda en cuanto pudiéramos y desde Mahou San Miguel nos ayudaron con el cerramiento de la terraza de cara al frío y, además, nos hicieron una entrega de producto equivalente a una semana de consumo", asegura Jorge.

Mario (Granada): "No es solo ayudarme a mí, estamos hablando de muchísimos bares"

A cientos de kilómetros de A Coruña y Barcelona, donde tienen sus negocios Iago y Jorge, Mario Ramírez es el propietario en Granada de Restaurantes Ramírez. Mario confiesa que adaptarse a la nueva situación no ha sido fácil e incluso sintieron "desesperación por la falta de información de qué se podía hacer y qué no y los cambios constantes de normativa, aunque en seguida nos reinventamos".

Restaurantes Ramírez cuenta con un servicio de catering y "eso nos permitió no tener que cerrar en ningún momento e intentamos desarrollar nuevos servicios para seguir adelante". Aunque de cuarenta trabajadores pasaron a solo tres, nunca perdió la fe: "Tenía claro que esta situación iba a pasar porque era inviable e insostenible para el sector estar cerrados y tener a tanta gente en ERTE".

Mario ha tenido que readaptar el negocio "sobre todo en el exterior de los restaurantes, porque todo el espacio tenía que ser más amplio, las mesas debían estar más separadas y, además, la gente no quería estar en el bar, sino en la terraza o en otros espacios, así que tuvimos que poner en marcha otro tipo de servicios que no hacíamos, como el take away, para llegar a sus casas".

Este hostelero está muy agradecido por "el apoyo de los clientes, tanto durante el confinamiento como después de él" que le hizo "notar el cariño y el apoyo", como Mahou San Miguel, que igualmente ha supuesto un impulso para el negocio: "Desde Mahou San Miguel nos han hecho una entrega de producto, sobre todo barriles para nuestros locales. Toda ayuda es de agradecer y las grandes marcas han estado a la altura, sobre todo teniendo en cuenta que no tienen ni uno, ni dos, ni tres clientes. No es solo ayudarme a mí, estamos hablando de muchísimos bares a nivel nacional".

Son tres testimonios que hablan por otros tantos hosteleros agradecidos a empresas que, como Mahou San Miguel, no les dejaron solos en ningún momento durante la pandemia de la Covid-19 y les ayudaron a salir adelante. Ahora, poco a poco, están volviendo a ver la luz en sus negocios, pero todavía queda mucho por hacer. “No queremos que ningún hostelero se quede atrás y, con la campaña “Somos Familia”, nuestro objetivo es trasladarles a todos –pequeños, medianos y grandes bares y restaurantes- que seguimos aquí, porque todavía queda mucho por hacer”, añade el directivo de la compañía.