Gastronomía riojana, un universo de estrellas que se nutre de las mejores materias primas

Comer en La Rioja es siempre un placer. Ya sea en algunos de sus grandes restaurantes con estrellas Michelin o en pequeños establecimientos donde las tapas alcanzan su máxima expresión. Los productos de proximidad son la mejor materia prima en ambos casos y hacen que degustar la cocina riojana sea siempre un privilegio.

La Rioja es una región privilegiada también por su gastronomía, que marida a la perfección con los mejores vinos de Rioja. En la región conviven esa cocina de siempre, tradicional y hogareña, con la cocina con mayúsculas de sus restaurantes con estrellas Michelin, que sacan todo el provecho al producto de proximidad en una tierra de por sí generosa, que hace de rica despensa y aporta un amplio abanico de alimentos de calidad.

La comunidad riojana atesora más estrellas Michelin por habitante que ninguna otra de España: siete en seis restaurantes de cocina de altura, como son El Portal de Echaurren, en Ezcaray, que suma dos estrellas y este año cumple nada menos que 125 años; y los restaurantes Venta Moncalvillo, en Daroca de Rioja; Ikaro y Kiro Sushi, ambos en Logroño; y Nublo, en Haro.

A ellos se suma en 2023 el restaurante Ajonegro, que regentan una pareja de cocineros compuesta por la mexicana Mariana Sánchez y el riojano Baquedano, que se conocieron cuando ambos trabajaban en el restaurante ABaC, del popular Jordi Cruz, que suma tres estrellas Michelin.

La mejor relación con el producto de calidad

Los grandes cocineros que trabajan en estos establecimientos estrellados de La Rioja han sabido recoger las peculiaridades que hacen únicas a sus propuestas gastronómicas y la mejor relación con el #productoriojano desde la despensa, pero también desde la cultura, la tradición y la memoria, la creatividad y la técnica.

Entre sus platos están esos que aúnan tradición y modernidad. Y es que La Rioja está ante la gran oportunidad de renovar los valores que siempre dejaron huella en la cocina. Esos platos que inspiran a las nuevas generaciones y que tienen en cuenta que los cultivadores son los ‘primeros cocineros’, o que se sirven de la fusión de cocinas para crear platos únicos, con el añadido de que en La Rioja se consigue el mejor maridaje, ya que la región cuenta con vinos excepcionales que lo hacen posible.

La cultura de la tapa

En la excepcional cocina riojana, además de grandes platos en sus restaurantes, tiene en las populares tapas otro de sus grandes manjares. La cultura de la tapa se vive a diario en sus bares de pinchos, gastrobares y casas de comidas, tan afamadas por su cocina de proximidad, donde gastronomía y vino se unen para mostrar La Rioja como uno de los grandes territorios enogastronómicos.

Si los restaurantes tienen en el producto de proximidad su principal materia prima, los establecimientos especializados en tapas comparten la idea y se nutren de una despensa inigualable con la que componen pequeñas obras de arte a base de esos grandes productos que ofrece la tierra riojana, que muestran una calidad excepcional para sorprendernos.

La Rioja no se concibe sin su apreciada gastronomía, que va de lo popular a lo más selecto sin perder un ápice de calidad. Esa "gastronomía en miniatura" que sorprende en sus locales de proximidad con tapas peculiares y reforzada por una cocina selecta y premiada. Así es posible ofrecer a quienes visitan la comunidad un mundo de posibilidades gastronómicas. Porque comer en La Rioja es un privilegio y nunca defrauda.

Más información en www.lariojaturismo.com