La infertilidad de causa inmunológica también es una realidad

Dra. Silvia Sánchez-RamónMédico Especialista en Inmunología y jefa de la Unidad de Inmunología Clínica del Hospital Ruber Internacional de Madrid

bebéLa infertilidad de causa inmunológica presenta uno de los desafíos más complejos para las parejas que intentan concebir. Se trata de un mal funcionamiento del sistema inmunitario que puede manifestarse en diversas complicaciones, como abortos recurrentes, fallos de implantación o preeclampsia, entre otros. Estos factores, no relacionados con la edad materna avanzada ni con la paterna, requieren de un enfoque multidisciplinar riguroso y coordinado entre diferentes especialistas.

El diagnóstico y tratamiento de la infertilidad inmunológica exige la colaboración estrecha entre inmunólogos, ginecólogos y otros expertos, quienes, como equipo, analizan y proponen soluciones personalizadas. En este contexto, el inmunólogo actúa como un asesor clínico especializado, que complementa y enriquece la labor del ginecólogo obstetra, el médico de referencia para la pareja.

El tratamiento de estos casos no es generalizable, ya que implica un enfoque individualizado, basado en pruebas especializadas que identifican los desequilibrios inmunológicos que pueden estar interfiriendo en el proceso reproductivo. Estas pruebas incluyen desde análisis de sangre para detectar anticuerpos y otros biomarcadores celulares e inflamatorios o autoinmunes, que pueden estar afectando la implantación del embrión o el mantenimiento del embarazo.

El sistema inmunitario no solo es crucial para la defensa del organismo frente a infecciones, sino que también desempeña un papel clave en la salud reproductiva. Durante el embarazo, este sistema debe ser lo suficientemente flexible para permitir que el embrión, un organismo genéticamente e inmunológicamente distinto, se implante y desarrolle en el útero materno. En situaciones normales, el sistema inmunitario colabora activamente en la protección y desarrollo del embrión. Sin embargo, cuando falla esta comunicación, puede reconocer al embrión como un "invasor" y desencadenar una respuesta adversa, que dificulta su implantación o lleva a la pérdida del embarazo.

Cuando las células del embrión son "extrañas"

El aborto recurrente, definido como la pérdida espontánea de dos o más embarazos consecutivos antes de la semana 20 de gestación, es una indicación para descartar infertilidad de causa inmunológica. En estos casos, es fundamental realizar estudios inmunológicos detallados, independientemente de la edad de los padres.

Del mismo modo, en los casos de fracaso repetido en la implantación de embriones tras varios intentos de fecundación in vitro (FIV), puede ser indicativo de una causa inmunológica adversa en el útero. Estos indicios deben ser valorados por un inmunólogo clínico, en coordinación con el ginecólogo obstetra, para identificar las causas y desarrollar un plan de tratamiento adecuado.

Un enfoque interdisciplinar para el diagnóstico y tratamiento

El diagnóstico de la infertilidad inmunológica es un proceso complejo que requiere de un enfoque interdisciplinar. El inmunólogo, como parte esencial de este equipo, tiene la responsabilidad de realizar pruebas inmunológicas especializadas y coordinarse con otros profesionales para interpretar los resultados y planificar el tratamiento.

Entre las posibles causas de infertilidad inmunológica se encuentra el síndrome antifosfolipídico obstétrico, una de las más comunes en casos de aborto recurrente. Esta condición se caracteriza por la presencia de anticuerpos que interfieren con la coagulación sanguínea, aumentando el riesgo de isquemia o de trombosis en los vasos que nutren al feto. Asimismo, la incompatibilidad entre ciertos genes materno-fetales (HLAC KIR) o condiciones como la celiaquía no diagnosticada pueden influir en la infertilidad y en las pérdidas gestacionales recurrentes.

El tratamiento, por lo tanto, debe ser cuidadosamente planificado y personalizado. Además de los tratamientos médicos, como el uso de antiagregantes, anticoagulantes o inmunomoduladores, los cambios en el estilo de vida también juegan un papel crucial. La gestión del estrés, la adopción de una dieta adecuada (especialmente en casos de celiaquía), y la implementación de técnicas de relajación, como la meditación o el yoga, son factores que pueden mejorar notablemente las probabilidades de éxito.

El camino hacia una maternidad y paternidad saludables

Dra. Silvia Sánchez RamónPara muchas parejas, los problemas de fertilidad inmunológica pueden parecer un desafío insuperable. Sin embargo, con un equipo interdisciplinar de especialistas que incluye a inmunólogos, ginecólogos, endocrinólogos y otros profesionales de la salud, se pueden identificar las causas y trazar un camino hacia el éxito reproductivo.

El rol del inmunólogo, como asesor clínico del ginecólogo obstetra, es esencial en este proceso, y su intervención temprana puede marcar la diferencia en la búsqueda de un embarazo exitoso. Si bien los factores inmunológicos no están relacionados con la edad de los padres, su identificación y tratamiento adecuado abren una ventana de esperanza para aquellas parejas que han enfrentado dificultades en su camino hacia la paternidad.

Según datos de la Sociedad Española de Fertilidad (SEF), entre el 15% y el 17% de las parejas en edad reproductiva en España experimentan problemas de fertilidad. Este problema de salud puede ser causado por una variedad de factores, que incluyen problemas hormonales, anatómicos, genéticos, infecciosos e inmunológicos.

La infertilidad de causa inmunológica generalmente se considera dentro del contexto de la infertilidad de causa desconocida, y dentro de este grupo, se estima que entre el 20% y el 40% de estos casos hay implicados factores inmunológicos.