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Covid y residuos: donde y como hay que tirar una mascarilla usada

Público

Ha pasado de ser un elemento ajeno para la inmensa mayoría de gente a formar parte de nuestro atuendo diario. Se trata de la mascarilla, cuyo uso se ha convertido en habitual con la pandemia y que sigue siendo una de las principales ayudas para frenar los contagios de covid. La pandemia se inició hace dos años y, tras el primer confinamiento, empezamos a poder pasear de nuevo por la calle. Desde entonces, las mascarillas no solo han tapado la boca y la nariz: también han empezado a vagar por el suelo, a veces porque con el viento echan a volar desde las papeleras, o simplemente porque hay quien opta por deshacerse rápidamente de ellas. Ahora bien, que una mascarilla acabe en el suelo puede tener consecuencias negativas.

Las mascarillas, al igual que otros residuos de higiene personal –como los guantes sanitarios, los bastoncillos de las orejas o las compresas–, deben tirarse junto con la fracción resto (contenedor gris). A medida que ha avanzado la pandemia, ha surgido la duda de como tirar los residuos cuando están contaminados de covid o son susceptibles de estarlo, como puede ser el caso de las mascarillas: la Agència de Residus de Catalunya afirma que cerrar bien la bolsa donde se depositen estos desperdicios ayuda a evitar que generen un posible riesgo de contagio. Este organismo también recuerda que, ya en la primera ola de la pandemia, el Departament de Salut de la Generalitat emitió una serie de protocolos sobre como tratar en casa los residuos de una persona enferma de covid-19, y es con una triple bolsa y sin separar para reciclar.

Acerca el riesgo que puede acarrear que este tipo de residuos terminen en el medio natural, la Agència de Residus de Catalunya indica que los considera como cualquier otro susceptible de terminar abandonado en la naturaleza. Más allá del potencial riesgo de contagio, aunque relativamente improbable, que puedan generar, esta es una problemática que engloba muchos tipos de desperdicios. En un altísimo porcentaje es generada por la acción humana, y se ha agravado aún más si cabe con las mascarillas y otros residuos específicos generados con la irrupción de la pandemia.

Una de las preocupaciones recurrentes que han expresado las entidades medioambientales en los últimos dos años es que las mascarillas acaben en el mar, que ya de por si engulle muchísimos residuos. Una de las vías más directas para que ello ocurra es cuando se tiran las mascarillas al inodoro, algo que no debe hacerse en ningún caso. En las redes sociales también es habitual ver como se vierten peticiones para cortar las tiras o cordeles que sirven para sujetar las mascarillas a la cabeza, con el fin de que, si finalmente terminan en la naturaleza, al menos que los animales no queden enredados en ellas. La Agència de Residus de Catalunya no desaprueba esta práctica de cortar los cordeles, pero considera que, con una buena gestión de este tipo de residuos por parte de la ciudadanía y de los profesionales sanitarios, se reduce enormemente el riesgo de que terminen abandonados en el mar.

Los residuos en pandemia

A día de hoy no existen datos actualizados en cuanto al incremento de residuos derivados de las nuevas necesidades generadas durante la covid, como el de ir con mascarilla. Ahora bien, la Agència Catalana de Residus detalla que, durante la primera ola de la pandemia, los residuos sanitarios se incrementaron en un 350% en Catalunya. En cambio, entre mediados de marzo y mediados de abril del 2020, periodo que coincidió con el confinamiento domiciliario más estricto, la recogida de residuos municipales cayó un 17%.