TEA diagnóstico diferencial. TDAH vs TEA

Dr. Daniel Martín Fernández-MayoralasNeuropediatra del Complejo Hospitalario Ruber Juan Bravo de Madrid

Existen una serie de características que pueden ayudar a distinguir el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) del Trastorno del Espectro Autista (TEA): los niños afectados por TDAH presentan las habilidades del lenguaje pragmático normal, un comportamiento social no verbal normal -o al menos muestran menos retraimiento social-, mantienen un juego imaginativo normal -tienden a tener más amigos-, presentan falta de patrones de conducta, intereses y pautas restringidas y repetitivas y tienen mayores probabilidades de iniciar una conversación.

Diferencias en habilidades sociales entre TEA y TDAH

Los estudios que comparan niños con TDAH, niños con TEA y niños con normodesarrollo demuestran que ambos grupos tienen deficiencias en el rendimiento y desempeño social, pero algunas características diferenciales:

El patrón de déficit social entre los dos grupos clínicos es diferente, pues el TEA presenta deficiencias en el conocimiento de "cómo" socializarse, más propensión a carecer de un conocimiento adecuado sobre el comportamiento correcto, una peor cognición social y peor teoría de la mente (en pruebas básicas de laboratorio, donde los TDAH no fallan) y una severidad en las deficiencias cognitivas sociales y en la empatía (aun evitando el sesgo de CI).

Sin embargo, la mayoría de los niños con TDAH muestran déficits en los comportamientos sociales reales, pero pasan las tareas de cognición social en entornos de laboratorio y son más propensos que los niños con TEA a mostrarse hostiles, presumir o ser mandones con compañeros, lo que conlleva malas impresiones iniciales y pérdida de amigos.

Recomendaciones de tratamiento en habilidades sociales

Pueden emplearse técnicas conductuales compartidas en TDAH Y TEA, aunque los TEA -no así los TDAH-, se benefician de instrucciones directas para aumentar el conocimiento sobre los comportamientos correctos que deben implementarse e instrucciones directas sobre habilidades de cognición social para abordar una falta de conocimiento fundamental en esta área.

Implicaciones de no reconocer ni tratar TDAH comórbido al TEA

En cualquier caso, debemos tener en cuenta que el diagnóstico del TDAH es importante en TEA, pues los propios síntomas centrales de TEA son más graves y numerosos si no se minimiza el TDAH.

De hecho, se han estudiado las implicaciones de no reconocer ni tratar el TDAH comórbido al TEA, hasta el punto de que la co-ocurrencia del TDAH con TEA se ha asociado con:

Afectación de las habilidades de la vida diaria y de síntomas propias del TEA en comparación con el diagnóstico único de TEA.

  • Rendimiento intelectual / escolar / extraescolar = baja autoestima.
  • Incremento de problemas de conducta.
  • Empeoramiento aún mayor del ya deficiente desempeño social.
  • Interferencia con las intervenciones conductuales específicas de TEA.
  • Intentos de tratar el TDAH con intervenciones específicas para TEA, a las que no responden los pacientes con TDAH.
  • Mayor riesgo de trastornos disruptivos, disregulación del estado de ánimo y abuso de sustancias.