Conoce las claves para una buena lactancia artificial de tu bebé

Por Natalia Gallardo y Laura SánchezEnfermeras de las consultas de enfermería del Servicio de Pediatría del Hospital Quirónsalud San José, y autoras del blog ‘Enfermeras entre pañales’

La OMS recomienda la lactancia materna para alimentar a nuestros hijos ya que considera que la leche materna es la mejor opción para ellos por todos los beneficios que obtienen de ella. En ocasiones, ya sea por motivos de salud o por decisiones personales, la lactancia materna no se puede llevar a cabo y, en ese caso, utilizaremos leche artificial infantil. La leche de fórmula es una opción válida y segura que proporciona a nuestros hijos todos los nutrientes necesarios para que crezcan sanos y saludables.

¿Qué tipo de leche debo utilizar?Conoce las claves para una buena lactancia artificial de tu bebé

Según la edad del niño, existen varios tipos de leche artificial infantil:

  • La leche de inicio o Tipo 1, es aquella que podemos dar a nuestro bebé desde su nacimiento hasta los seis meses.
  • La leche de continuación o Tipo 2, la ofrecemos a partir de los seis meses hasta el año de vida.
  • La leche de crecimiento o Tipo 3, a partir de los 12 meses.

La leche artificial la podemos encontrar en formato polvo o en formato líquido. Es muy importante recordar que, siempre que preparemos el biberón con leche en formato polvo, se debe respetar la siguiente regla: por cada 30 ml de agua, se debe añadir un cacito raso y no compactado de polvo. Utilizaremos siempre esta medida y en caso de que el bebé se quede con hambre podremos preparar 30 ml más.

¿Cómo preparamos un biberón?

Lo primero que debemos hacer es lavarnos bien las manos con agua y jabón y limpiar y desinfectar la superficie donde vamos a preparar el biberón. El agua que utilicemos para preparar el biberón puede ser del grifo o podemos comprar agua embotellada de mineralización débil adecuada para la alimentación infantil. Si usamos agua del grifo, debemos hervirla durante un minuto y dejarla enfriar un poco antes de mezclarla con el polvo. Se recomienda, siempre que se pueda, preparar el biberón en el mismo momento en que se lo vamos a dar ya que, la leche artificial una vez preparada, si se conserva a temperatura ambiente se convierte en el medio de cultivo perfecto para el crecimiento de bacterias. Si vamos a salir de casa, se puede llevar en un termo el agua caliente necesaria para las diferentes tomas de biberón y, los cacitos de leche en polvo que correspondan a cada toma, en recipientes independientes. Así nos resultará más fácil y cómodo. Antes de poner el biberón en la boca de nuestro pequeño, siempre debemos comprobar la temperatura de la leche, mejor tibio que caliente.

Una vez finalizada la toma, separaremos las diferentes piezas del biberón (tetina, rosca, tapa, válvula) y las lavaremos con agua y jabón, aclarándolas bien después para que no queden restos de leche. Es recomendable, en los dos primeros meses de vida, una vez limpios los biberones, esterilizarlos, bien en agua hirviendo, o utilizando un esterilizador. Para que no se contaminen, se pueden quedar en el esterilizador hasta que volvamos a utilizarlos o bien, se pueden montar, tapar y guardarlos en un sitio limpio.

La crianza de un hijo genera dudas y miedos. Nosotras estamos aquí para ayudaros. Enfermeras entre pañales en un blog creado por y para las familias. Si tenéis cualquier duda o pregunta podéis escribir en nuestro blog:

https://www.quironsalud.es/blogs/es/blogs-quironsalud/enfermeras-panales