Por qué somos tan perezosos por la mañana y nos cuesta tanto despertarnos

Dormir es tan necesario para nuestra salud como comer. Invertimos una tercera parte de nuestra vida durmiendo y es que,...

Dr. Juan Antonio Pareja GrandeResponsable de la Unidad del Sueño del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid

Dormir es tan necesario para nuestra salud como comer. Invertimos una tercera parte de nuestra vida durmiendo y es que, sin este hábito, o mejor dicho, necesidad, nuestro cuerpo no gozaría de buena salud. Dormir le sirve a nuestro organismo para ‘resetearse’ y cargar las pilas frente al día siguiente. Ahora bien, aquí es donde aparecen los problemas muchas veces, más si somos perezosos.

Por qué somos tan perezosos por la mañana y nos cuesta tanto despertarnos

Si alguien dice que nunca se le pegan por la mañana las sábanas, no es cierto. A todos, y más de un día, nos suena la alarma hasta en varias ocasiones, y es que nos gusta tanto dormir y descansar, estamos tan a gusto en la cama, que arrancar, levantarnos de la cama y empezar un nuevo día nos cuesta.

Pero esto tiene una explicación científica. De hecho, existen varias razones por las que cuesta levantarse por las mañanas, destacando principalmente las siguientes:

  1. Activación de los lóbulos frontales: se trata de unas estructuras cerebrales que regulan la voluntad y, en parte, el juicio y el razonamiento. Durante el sueño están inactivos y cuando nos despertamos pueden tardar en activarse, de manera que, durante unos instantes, se carece de voluntad, ni de razonamiento correcto, lo que lleva a tomar la decisión de seguir durmiendo.
  2. La denominada inercia del sueño: algunas personas tienen una tendencia natural que predispone a que el cambio del sueño a la vigilia sea lento.
  3. Regulación homeostática del sueño: se trata de un sistema biológico que tiene como misión mantener el equilibrio, lo que en este caso implica que uno duerma lo que necesita. Además, la homeostasis en el sueño funciona de forma similar a otras necesidades como el hambre o la sed, lo que hace que, cuando se ha descansado lo necesario, el cuerpo se despierte satisfecho e inicie rápidamente la vigilia, pero si no ha dormido lo suficiente, el sistema homeostático presiona para mantener un poco más de sueño.

Qué podemos hacer para dormir con más facilidad

Si descansamos correctamente por la noche, también será más fácil levantarnos por la mañana.

Para poder conciliar el sueño con facilidad, conviene no hacer deporte a partir de las siete de la tarde. Hay que tener en cuenta que el sueño sucede por la noche, coincidiendo con un ligero descenso de la temperatura corporal. Por el contrario, el deporte nocturno aumenta esa temperatura corporal, lo que interfiere con la conciliación del sueño, disminuyendo el tiempo de descanso nocturno.

Igualmente, es recomendable no exponerse a luz demasiado intensa por la noche, como la existente en discotecas, cines, etc., ya que puede retrasar el inicio del sueño y, con él, acortar el tiempo de descanso nocturno.

Dr. Juan Antonio Pareja Grande
Dr. Juan Antonio Pareja Grande

Otra recomendación es no utilizar gafas de sol por la mañana, ya que la luz natural de las primeras horas matutinas robustece los ciclos sueño-vigilia y facilita el descanso nocturno.

Y, si es posible, mejor no trabajar en turnos laborales variables, que dificultan la regulación de los ciclos sueño-vigilia.

Sobre si es bueno o no fraccionar el sueño al despertarse, destacar que el sueño natural y normal culmina en el despertar con sensación de haber descansado lo suficiente y encontrarse listo y pleno de energía para afrontar el día. Por ello, fraccionar el despertar es signo de sueño insuficiente y no reparador, o de trastornos que cursan con somnolencia excesiva. Incluso, con menor frecuencia, indica pereza o indolencia.

Entonces, ¿qué ocurre cuando por la mañana suena la alarma muchas veces y aún así no somos capaces de levantarnos? Si una persona tiene una inercia del sueño exagerada o no consigue alertarse con estímulos enérgicos y repetidos, debe pensarse que padece un trastorno del sueño, del tipo hipersomnia (somnolencia excesiva), y debe consultar al médico.

Consejos para que cueste menos despertarse por las mañanas

Según la Sociedad Española de Sueño (SES), dormir bien tiene una estrecha relación con la salud y la calidad de vida, por lo que, cuando este falla, la salud y la calidad de vida disminuyen.

Por todo ello, he aquí una serie de pautas generales que podemos seguir si queremos lograr que nos cueste menos levantarnos por la mañana:

  • Dormir lo suficiente.
  • Mantener unos horarios de sueño y vigilia regulares.
  • No ingerir alcohol, café, ni bebidas estimulantes, ni tampoco comidas picantes por la noche.
  • No autoadministrarse productos sedantes, ni estimulantes.
  • Que las siestas como máximo duren 20 minutos.
  • Procurarse unas condiciones confortables en el dormitorio, en cuanto a temperatura, humedad, un colchón y almohada confortable.
  • Realizar ejercicio de forma regular, pero no justo antes de acostarse.
  • Eliminar ruido y luces que puedan molestar a la hora de conciliar el sueño.