¿Qué es el Síndrome de Congestión Pélvica?

Dr. Rubén Rodríguez CarvajalJefe del Servicio de Angiología y Cirugía Vascular del Hospital Quirónsalud Campo de Gibraltar

El Síndrome de Congestión Pélvica (SCP) es un trastorno vascular que afecta a las venas de la región pélvica como consecuencia de un aumento de la presión de las venas en esta región, las ováricas y las peri-uterinas. Esto ocurre cuando las venas de esta zona se dilatan y la sangre no se drena correctamente, acumulándose y aumentando la presión en la zona, lo que provoca varices en las piernas, en la parte del bajo vientre o alrededor del útero.

¿Qué es el Síndrome de Congestión Pélvica?

Es una patología que se manifiesta fundamentalmente en mujeres entre los 30 y los 35 años y hasta los 50 y que han tenido más de un parto. Con los embarazos se produce un aumento del desarrollo de los vasos sanguíneos en la zona del útero y de los ovarios que hace que aparezcan varices alrededor del útero. Estas varices hacen que aumente la presión y terminan generando más varices en las piernas y la región genital.

Los hombres también pueden sufrir Síndrome de Congestión Pélvica, que les provoca varicocele testicular, es decir, dilatación de las venas del escroto, lo que puede causar un desarrollo deficiente del testículo, baja producción de esperma e incluso otros problemas que pueden provocar infertilidad.

¿Cuáles son los síntomas del SCP?

Lo primero que debemos tener en cuenta son las diferentes causas por las que se produce el Síndrome de Congestión Pélvica. Entre las distintas razones podemos contar los problemas musculoesqueléticos, quistes ováricos, síndrome del intestino irritable, vejiga dolorosa y factores psicológicos o ginecológicos. La patología aparece de repente, provocando un dolor bastante incapacitante en la zona del bajo vientre de las mujeres. Los síntomas son, principalmente, un dolor crónico en la pelvis durante más de seis meses; fuertes molestias durante los ciclos menstruales; dolor pélvico durante y después de las relaciones sexuales; inflamación en la zona perineal, la vagina o los labios vaginales, así como venas varicosas en la parte superior de los muslos, labios vaginales, región suprapúbica o perineal.

Además de hinchazón de vientre, que a veces se puede confundir con síntomas gastrointestinales, también puede presentarse incontinencia de esfuerzo o frecuencia de micción. Estos síntomas pueden repercutir en la calidad de vida de las mujeres que se ven afectadas, tanto física como emocionalmente.

¿Cómo se diagnostica el SCP?

No todas las pacientes que tienen dolor pélvico sufren Síndrome de Congestión Pélvica. Para diagnosticar un SCP hay que elaborar una historia clínica de la paciente que incluya la edad, embarazos o antecedentes familiares y así poder excluir cualquier patología de origen ginecológico. Es necesario solicitar una ecografía transabdominal y otra translabial en posición de pie, ya que la dilatación de las venas periuterinas puede pasar desapercibida si la ecografía se realiza en posición supina, además de una venografía, una radiografía de las venas que se hace inyectando un colorante especial en las venas o en la médula.

Nuevos tratamientos

Una vez confirmado el diagnóstico, existen distintos tratamientos. En el Hospital Quirónsalud Campo de Gibraltar llevamos a cabo desde 2014 un programa consistente en un procedimiento endoluminal, a través de los vasos sanguíneos, mínimamente invasivo y que se lleva a cabo como cirugía mayor ambulatoria, de modo que los pacientes se pueden ir a casa el mismo día que se realiza el tratamiento.

Dr. Rubén Rodríguez Carvajal
Dr. Rubén Rodríguez Carvajal

Con anestesia local, realizamos una embolización de las venas ováricas y periuterinas para, una vez localizadas las venas dilatadas, colocar unos tampones que inhiban el deficiente flujo venoso que provoca la presión.

El resultado permite a la paciente recuperar su calidad de vida y evita un tratamiento más invasivo como puede ser la histerectomía, aliviando el dolor pélvico crónico, las molestias durante y después de la actividad sexual, así como los dolores menstruales, además de reducir las varices en la región vaginal y genital. En definitiva, mejorar la calidad de vida de las pacientes.