Boca-mano-pie, ¿cuáles son los síntomas?

Dr. Goran RisticJefe del Servicio de Pediatría del Hospital El Pilar

Boca-mano-pie, ¿cuáles son los síntomas?La enfermedad "boca-mano-pie" es una infección viral y contagiosa muy frecuente en niños menores de cinco años. Provoca ampollas rojas y dolorosas en la boca, la garganta, las manos, los pies y el área del pañal, causadas, la mayoría, por la infección de un virus que pertenece a la familia de los enterovirus, el virus coxsackie. Puede aparecer en cualquier época del año, pero con más frecuencia en verano y otoño. Se contagia fácilmente por contacto con las manos sucias, saliva, mocos, el líquido de las ampollas o las heces. Estas infecciones son muy habituales en las guarderías, los campamentos de verano, en las aulas de preescolar y en general en los lugares donde hay varios niños juntos.

Síntomas para detectar la enfermedad

Además de las ampollas, los niños suelen tener fiebre y síntomas similares a los de la gripe: dolor de garganta, pérdida de apetito y malestar general. Hay que tener cuidado para evitar la deshidratación de los pequeños, porque les duele la garganta al tragar líquidos y suelen rechazar la bebida. También produce llagas en la boca, aftas, que empiezan con pequeños puntos rojos en la boca y la lengua convirtiéndose después en ampollas, por eso los niños, dejan de comer y beber por las molestias que les produce estas aftas, prefiriendo cosas frías que les alivian. El sarpullido es otro síntoma de esta enfermedad, aparecen manchas rojas planas o un poco elevadas con un área enrojecida en la base. Este sarpullido suele presentarse en las palmas de las manos y las plantas de los pies, así como en los glúteos, las piernas y los brazos, pero no muestra picor y hay que tener cuidado para no confundir estas ronchas con picaduras de insectos.

En ocasiones puede ser difícil detectar la enfermedad de mano-boca-pie si solo se desarrollan las úlceras dentro de la boca, por eso hay que estar muy pendiente si un niño, sobre todo si es muy pequeño y no puede comunicar que le duele la garganta, se vuelve más irritable o duerme más de lo habitual, si comienza a babear porque le cuesta tragar y solo quiere tomar líquidos fresquitos además de tener diarrea o vómitos frecuentes. Si se detecta alguno de estos síntomas es importante acudir al pediatra lo antes posible para determinar el diagnostico y el tratamiento adecuado.

Contagio y tratamiento

Si una persona con la enfermedad tose o estornuda, las gotas respiratorias que expulsa contienen partículas de virus que entran en contacto con otras personas contagiándolas. También al tocar superficies u objetos que hayan estado en contacto con el virus como juguetes o muebles, y luego echarse las manos a la nariz, la boca o los ojos. Al cambiar los pañales, después tocarse la cara, ojos, nariz o boca, se produce el contagio. Por eso, lavarse bien las manos es la mejor protección, sobre todo después de ir al baño o de cambiar los pañales al bebé, antes de preparar la comida o de comer. La enfermedad es más contagiosa durante la primera semana, aunque el virus puede permanecer en el cuerpo del paciente durante varias semanas, por eso es importante, para prevenir el contagio, que el niño, si tiene la enfermedad, se quede en casa y no acuda a la escuela o la guardería mientras tenga fiebre o ampollas en la piel o la boca. También es conveniente desinfectar las superficies y los juguetes que utilizan los niños, sobre todo en los colegios, porque, como hemos dicho, muchos virus pueden vivir varios días sobre los objetos.

Dr. Goran RisticNo existe tratamiento específico, tan solo medidas para aliviar los síntomas, pero si cabe recordar las medidas que debemos adoptar para reducir el riesgo de contagio: Lavarse las manos a menudo, durante 20 segundos mínimo, sobre todo después de ir al baño, toser, estornudar, limpiarse la nariz, cambiar un pañal y antes de comer o preparar los alimentos; desinfectar las zonas comunes que puedan estar en contacto con personas infectadas y por supuesto, evitar el contacto con personas enfermas mientras tengan síntomas y evitar que los niños con contagiados acudan a los centros escolares.

Con estas recomendaciones podemos evitar riesgos innecesarios de contagio de mano-boca-pie, para resolver cualquier consulta, duda o problema referente a esta enfermedad, desde este espacio intentaremos dar solución a cualquier cuestión.